Argentina: Nuevos contenedores para separar la basura en Capital

Macri y Santilli en la presentación de los contenedores

Con el propósito de promover la clasificación de residuos en origen, el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Mauricio Macri, presentó ayer los nuevos contenedores de basura que se dispondrán en las calles porteñas.

Estos recipientes tienen 3200 litros (tres veces más grandes que los anteriores) y se dividen en negros para los residuos húmedos y verdes para los secos. En esta primera etapa se dispondrán unos 200 contenedores en el centro (entre las calles Entre Ríos, Rivadavia, Belgrano y Lima), mientras que en 2012 llegarán a otros barrios de la Ciudad.

 Los contenedores están cerca de las esquinas y no se pueden mover. La idea es instalar uno negro por cuadra y uno verde por manzana, y la basura será descargada en uno de los laterales de los camiones. Mientras que de los residuos húmedos se encargarán las empresas de recolección, los secos serán manejados por las cooperativas de cartoneros.

De acuerdo a Diego Santilli, Ministro de Ambiente y Espacio Público “esto representa una inyección ecológica a la Ciudad que dejará nuestras calles y veredas más limpias, ayudará a reciclar más y mejorará notablemente las condiciones de trabajo de los recuperadores urbanos, que pasarán a realizar sus tarea en los centros verdes”.

Área de contendedores en la primera etapa

La segunda etapa de este plan está prevista para marzo, extendiéndose a los barrios de Villa Soldati, Villa Lugano y Villa Riachuelo. La idea es que para fines de 2012 toda la Ciudad disponga de contendedores verdes.

Como explicamos en varias oportunidades, la basura es una de las mayores problemáticas ambientales en Buenos Aires. Al contrario de lo planificado con la Ley de Basura Cero, los residuos enviados a los rellenos sanitarios crecen año tras año, aumentando así la contaminación.

Queda claro que los nuevos contenedores no van a resultar una solución definitiva para reducir efectivamente la cantidad de desechos, pero pueden representar el puntapié inicial para comenzar a cumplir alguna de las tantas promesas. A esto hay que sumarle, sin duda, una legislación adecuada, programas educativos e inversión en tecnología.