La contaminación del agua es uno de los problemas ambientales más graves, y con más peligrosas consecuencias para la salud humana. Por lo tanto, detectar la presencia de contaminantes en el agua es algo muy importante. Gracias a una investigación de la Universidad de Granada, se ha desarrollado un método más rápido y económico para detectar un tipo en particular de contaminantes llamados TEXs
Los TEXs (siglas para: tolueno, etilebenceno y xilenos) son substancias químicas que pertenecen a los compuestos aromáticos. Su uso industrial es muy extendido como materias primas, como disolventes y en productos derivados del petróleo. Los TEXs son altamente tóxicos y tienen una baja biodegradabilidad, lo que les ha convertido en un contaminante muy extendido. Cuando está presente en el agua puede ocasionar efectos muy nocivos sobre la salud, particularmente afectando el hígado, los riñones, los pulmones, el corazón y el sistema nervioso, provocando cáncer y enfermedades neurológicas.
Para facilitar la detección de estos contaminantes han desarrollo un sensor químico que indica la presencia en el agua de TEXs. Esto se logra utilizando la tecnología MIP (molecularly imprinted polymers, o polímero de impronta molecular). Estas moléculas funcionan como un molde que tiene la capacidad de atrapar los compuestos de la familia de los TEXs. Utilizando su fluorescencia intrínseca se obtiene un sensor óptico que mediante un test de screening indica si la contaminación supera el límite legal.
Fuente: SINC
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